El efecto de las podas tardías, uno de los errores más comunes
Garnica, empresa patrocinadora del I Simposio del Chopo, realiza desde el blog de su web corporativa una interesante labor de divulgación con la publicación periódica de informaciones de carácter técnico. Así, hace unos días, se referían en un artículo que pasamos ahora a reproducir a los efectos de las podas tardías (“uno de los errores más comunes en populicultura”, señalan):
“El momento en el que realizar las podas a los chopos es una cuestión muy importante a tener en cuenta en populicultura. La calidad de la madera, y por lo tanto su precio de venta, dependen directamente de la correcta realización en tiempo y forma de las podas.
Las podas tardías son uno de los errores más comunes en populicultura, ya que se realizan cuando los chopos se encuentran en la segunda mitad del turno de corta (más de 8 años) y son muy agresivas para el árbol.
Estas podas suelen generar heridas muy grandes, lo que dificulta su cierre en un breve plazo de tiempo. Como consecuencia, se crean unas grandes aberturas por las que el agua se va introduciendo en el interior del tronco durante varios años. Esta entrada constante de agua en el interior del árbol puede dar como resultado el manchado y la pudrición de la madera, lo que repercute directamente en la calidad de la misma.
Este es un error bastante costoso, ya que este tipo de podas no suelen ser ni mucho menos baratas, y además provoca justo el efecto contrario al buscado, lo que se traduce en una pérdida del valor de la madera debido a la baja calidad de la misma.
Por lo tanto, es importante tener claros los conceptos en cuanto al momento adecuado en el que se deben realizar las podas. Nuestra recomendación es que se deben efectuar en los primeros años de vida del árbol, cortando las ramas que sean necesarias antes de que engrosen demasiado. De este modo, las heridas que se produzcan por las podas no serán tan grandes y se podrán cerrar por sí solas en un breve espacio de tiempo de 2 a 3 años”.